Este sistema de entrenamiento puede ser todo lo que necesitas para lograr los mejores resultados en un tiempo récord, así que agarra el TRX y sácale provecho.
SENTADILLA A DOS PIERNAS
Toma el TRX con un agarre encontrado (palmas hacia adentro) a la altura del pecho. Los pies abiertos al ancho de los hombros, los codos pegados al cuerpo, la cadera ligeramente hacia atrás y las rodillas flexionadas. Haz la sentadilla estirando los brazos, con la mirada hacia el punto de anclaje y la columna recta. Vuelve a la posición inicial. No es un remo con sentadilla, así que no jales el TRX hacia tu cuerpo con los brazos.
FLY PARA PECTORAL
Toma el TRX con un agarre encontrado y párate haciendo un ángulo de 45 grados con respecto al suelo. Estira los brazos al frente, al ancho de los hombros, y apunta los codos hacia afuera. Abre los brazos hasta donde tu cuerpo lo permita con los codos un poco flexionados. Mantén tu cuerpo bien alineado de pies a cabeza y la mirada perpendicular a la inclinación. Después, regresa a la posición inicial.
CRUNCH EN SUSPENSIÓN
Sube los pies al TRX con las puntas hacia abajo en posición de plancha frontal. Apoya las manos en el suelo por debajo de los hombros, extiende los brazos, mantén las escápulas abiertas y forma una línea recta con el cuerpo. Lleva las rodillas al pecho, levantando la cadera y flexionando la espalda para una mayor contracción. Vuelve a la posición inicial. Para mayor dificultad pon tus manos más adelante.
ROLL OUT
Toma el TRX con un agarre en pronación (palmas hacia abajo). Párate sobre las puntas de los pies con una inclinación respecto al suelo, estira los brazos a la altura y al ancho de los hombros, en un ángulo de 90 grados con el tronco. Luego lleva las manos por encima de la cabeza lo más arriba que puedas llegar sin doblar los codos y manteniendo la mirada al frente. Vuelve a la posición inicial. Inclina más tu cuerpo para mayor dificultad.
CURL PARA ISOQUIOTIBIALES
Sube los talones al TRX acostado boca arriba, apoya solo la espalda alta para alinear tu cuerpo en una diagonal. Apoya los brazos en el suelo, mantén siempre la cabeza pegada al piso y procura no curvar la espalda. Flexiona las rodillas para llevar los pies a los glúteos, contrae todos los músculos y en especial los abdominales. Vuelve a la posición inicial. Hazlo más difícil levantando los brazos hacia el techo o hacia atrás.